En el ámbito del streaming y OTT, el A/B Testing es una técnica utilizada para comparar dos versiones de contenido, diseño, o funcionalidad con el fin de evaluar cuál ofrece un mejor rendimiento o experiencia de usuario. Por ejemplo, se pueden mostrar dos versiones de una interfaz de usuario o un contenido diferente a dos grupos distintos de usuarios, recopilando métricas sobre la interacción, tiempo de visualización o tasas de conversión. Los resultados ayudan a optimizar la experiencia de los espectadores y a tomar decisiones basadas en datos.

Adaptive Bitrate Streaming es una técnica que ajusta dinámicamente la calidad del video en tiempo real, de acuerdo con las condiciones de la red del usuario. A medida que el ancho de banda fluctúa o la conexión se debilita, el sistema reduce la calidad del video para evitar la interrupción de la transmisión. Del mismo modo, cuando la conexión mejora, la calidad del video aumenta automáticamente. Esto asegura una experiencia de visualización fluida, minimizando el buffering y garantizando que el contenido llegue en la mejor calidad posible dadas las circunstancias del espectador.

En el contexto de las plataformas de streaming, una API es un conjunto de funciones y procedimientos que permite la interacción entre diferentes aplicaciones y servicios. Las APIs juegan un papel crucial en el desarrollo de OTT y plataformas de streaming, ya que permiten la integración de funcionalidades como la autenticación de usuarios, la gestión de contenido, las transacciones de pago, o la recolección de datos analíticos. También se utilizan para proporcionar acceso a funciones específicas de plataformas de terceros, como redes sociales o servicios de recomendación de contenido.